El Departamento de Informática de una empresa es el encargado de velar por la seguridad y el buen funcionamiento del servidor o servidores de los que dispongan. Las grandes y medianas empresas manejan una amplia variedad de programas, bases de datos, páginas web y plataformas de correo que requieren en muchas ocasiones de disponer de más de un servidor. En ese sentido, muchas veces las compañías recurren a soluciones de servidores dedicados antes que disponer de su propio centro de datos in house.
Muchas de las empresas que ofrecen servicios de alojamiento trabajan con centros de datos independientes, o neutrales, es decir, espacios que alquilan la infraestructura y son utilizados por diferentes proveedores de alojamiento. En todo caso, siempre hay que comprobar que trabajamos con un proveedor serio y que cumple con los requisitos para ofrecernos de calidad y totalmente fiables. Veamos qué es lo que estos necesitan.
¿Qué necesita un servidor web para ser fiable?
Un servidor dedicado posee un precio más alto que algunas otras soluciones de hosting. Significa que todo el servidor está a nuestro servicio y debe estar suficiente preparado para responder a nuestras necesidades:
• Debe ser capaz de estar conectado durante las 24 horas del día.
• Soportar los picos de actividad a determinadas horas del día y también en las fechas señaladas.
• Accesos al disco altamente seguros, sobre todo si se usan aplicaciones con bases de datos.
• Posibilidad de hacer un uso intensivo del procesador, especialmente cuando pretendemos alojar aplicaciones web dinámicas.
• Contar con todo el software necesario para prevenir ataques informáticos, intentos de craking, etc.
• Pasar un control de calidad para evitar que salgan unidades defectuosas en la que los problemas puedan salir a la luz en producción.
• Unos controladores de hardware perfectamente depurados y un hardware compatible con los sistemas operativos más usados (Linux, Windows).
Los servidores dedicados que se utilizan en los centros de datos suelen ser ordenadores de marca, no clónico, ya que están sometidos a una fuerte actividad. Los ordenadores clónicos son aquellos en los que se han utilizado componentes de distintas marcas y ordenadores para configurar el servidor.
Esta es la opción que muchas veces se ha utilizado por motivos de ahorro, ya que a veces las empresas cuentan con ordenadores que ya no están en uso y deciden extraer sus componentes para configurar un servidor. El riesgo que tiene esto es de que no dispongamos del hardware más adecuado para tener un servidor a la altura de las características que necesitamos.
Procesadores, discos duros y RAM
Un buen servidor dedicado dispone de los recursos necesarios en cuanto a procesadores, discos duros y RAM para que puedas realizar tus actividades sin interrupciones indeseadas. En ocasiones queremos crear aplicaciones de unas características que implican un uso diferente de los recursos que los que se podrían tener un hosting compartido normal.
Ejemplo. Ese es el caso por ejemplo si vamos a programar una aplicación en Java, que generalmente requiere de una memoria RAM más elevada que en otros lenguajes de programación, como PHP o ASP. Por eso, en estos casos utilizar un servidor compartido acaba siendo una locura, ya que la aplicación competiría por utilizar los recursos del hosting frente a los otros usuarios. De hecho, muchos proveedores de hosting no soportan Java.
Muchas veces el problema de determinados hosting es que no podemos elegir la plataforma, el lenguaje de programación y el lenguaje de bases de datos que queremos utilizar. En los servidores dedicados nos ahorramos este problema. Sólo tendremos que decidir de antemano si pensamos trabajar con Windows o Linux, sabiendo que con Windows por ejemplo no podremos trabajar con PHP, algunos paneles de control no son compatibles y, en definitiva, que cada SO tiene sus peculiaridades.
En cuanto a los procesadores, algunos hosting nos ofrecen servidores dedicados con dos procesadores, lo que acaba resultando muy conveniente para aumentar nuestra capacidad de procesamiento. Cuando creamos una base de datos o un correo, la CPU suele poner los límites para trabajar con estas aplicaciones.
Por el mismo motivo, no sólo es importante contar con una buena capacidad de procesamiento, sino también con espacio en disco suficiente. Cuando hablamos de bases de datos pequeñas o servidores de correo con muy pocos usuarios, realmente no hay problema. Pero generalmente se alquila un servidor dedicado cuando no es precisamente ésta la situación.
Hay muchos usuarios de correo, y los correos se llenan rápidamente de contenido (muchas veces spam). Las bases de datos pueden ir creciendo exponencialmente, más allá incluso de los datos que añada el administrador. Piensa en las páginas web de anuncios, o bancos de datos, donde continuamente se están subiendo nuevos datos durante las 24 horas del día. Tener un espacio en disco exiguo puede ser muy perjudicial porque supone un límite al desarrollo y avance de la aplicación.
Por lo tanto: no te arriesgues a trabajar con un servidor que no esté a la altura de lo que necesitas. Escoge un servidor dedicado profesional, a ser posible con dos procesadores y un amplio disco duro que esté a la altura de tus necesidades, de modo que no tengas que añadir nuevos servidores al poco tiempo.
Muchas de las empresas que ofrecen servicios de alojamiento trabajan con centros de datos independientes, o neutrales, es decir, espacios que alquilan la infraestructura y son utilizados por diferentes proveedores de alojamiento. En todo caso, siempre hay que comprobar que trabajamos con un proveedor serio y que cumple con los requisitos para ofrecernos de calidad y totalmente fiables. Veamos qué es lo que estos necesitan.
¿Qué necesita un servidor web para ser fiable?
Un servidor dedicado posee un precio más alto que algunas otras soluciones de hosting. Significa que todo el servidor está a nuestro servicio y debe estar suficiente preparado para responder a nuestras necesidades:
• Debe ser capaz de estar conectado durante las 24 horas del día.
• Soportar los picos de actividad a determinadas horas del día y también en las fechas señaladas.
• Accesos al disco altamente seguros, sobre todo si se usan aplicaciones con bases de datos.
• Posibilidad de hacer un uso intensivo del procesador, especialmente cuando pretendemos alojar aplicaciones web dinámicas.
• Contar con todo el software necesario para prevenir ataques informáticos, intentos de craking, etc.
• Pasar un control de calidad para evitar que salgan unidades defectuosas en la que los problemas puedan salir a la luz en producción.
• Unos controladores de hardware perfectamente depurados y un hardware compatible con los sistemas operativos más usados (Linux, Windows).
Los servidores dedicados que se utilizan en los centros de datos suelen ser ordenadores de marca, no clónico, ya que están sometidos a una fuerte actividad. Los ordenadores clónicos son aquellos en los que se han utilizado componentes de distintas marcas y ordenadores para configurar el servidor.
Esta es la opción que muchas veces se ha utilizado por motivos de ahorro, ya que a veces las empresas cuentan con ordenadores que ya no están en uso y deciden extraer sus componentes para configurar un servidor. El riesgo que tiene esto es de que no dispongamos del hardware más adecuado para tener un servidor a la altura de las características que necesitamos.
Procesadores, discos duros y RAM
Un buen servidor dedicado dispone de los recursos necesarios en cuanto a procesadores, discos duros y RAM para que puedas realizar tus actividades sin interrupciones indeseadas. En ocasiones queremos crear aplicaciones de unas características que implican un uso diferente de los recursos que los que se podrían tener un hosting compartido normal.
Ejemplo. Ese es el caso por ejemplo si vamos a programar una aplicación en Java, que generalmente requiere de una memoria RAM más elevada que en otros lenguajes de programación, como PHP o ASP. Por eso, en estos casos utilizar un servidor compartido acaba siendo una locura, ya que la aplicación competiría por utilizar los recursos del hosting frente a los otros usuarios. De hecho, muchos proveedores de hosting no soportan Java.
Muchas veces el problema de determinados hosting es que no podemos elegir la plataforma, el lenguaje de programación y el lenguaje de bases de datos que queremos utilizar. En los servidores dedicados nos ahorramos este problema. Sólo tendremos que decidir de antemano si pensamos trabajar con Windows o Linux, sabiendo que con Windows por ejemplo no podremos trabajar con PHP, algunos paneles de control no son compatibles y, en definitiva, que cada SO tiene sus peculiaridades.
En cuanto a los procesadores, algunos hosting nos ofrecen servidores dedicados con dos procesadores, lo que acaba resultando muy conveniente para aumentar nuestra capacidad de procesamiento. Cuando creamos una base de datos o un correo, la CPU suele poner los límites para trabajar con estas aplicaciones.
Por el mismo motivo, no sólo es importante contar con una buena capacidad de procesamiento, sino también con espacio en disco suficiente. Cuando hablamos de bases de datos pequeñas o servidores de correo con muy pocos usuarios, realmente no hay problema. Pero generalmente se alquila un servidor dedicado cuando no es precisamente ésta la situación.
Hay muchos usuarios de correo, y los correos se llenan rápidamente de contenido (muchas veces spam). Las bases de datos pueden ir creciendo exponencialmente, más allá incluso de los datos que añada el administrador. Piensa en las páginas web de anuncios, o bancos de datos, donde continuamente se están subiendo nuevos datos durante las 24 horas del día. Tener un espacio en disco exiguo puede ser muy perjudicial porque supone un límite al desarrollo y avance de la aplicación.
Por lo tanto: no te arriesgues a trabajar con un servidor que no esté a la altura de lo que necesitas. Escoge un servidor dedicado profesional, a ser posible con dos procesadores y un amplio disco duro que esté a la altura de tus necesidades, de modo que no tengas que añadir nuevos servidores al poco tiempo.